martes, 29 de abril de 2014

Pizza calzone -masa con centeno integral-

La pizza es una de las comidas favoritas de los cachorritos, supongo que como de casi cualquier niño. Nosotros solemos cenarlas casi todos los viernes o sábados, en plan caseras y, además, son ellos quienes nos las preparan. Les encanta coger el rodillo y estirar la masa, pintarla con tomate y echar el queso rallado, aunque la mitad termina en su boca. Les gusta elegir los ingredientes, como buenos gourmets que son y no siempre quieren que sea igual, como cabría esperar de pequeñajos de su edad.

En fin, que como la propuesta de este mes para Bake the world era precisamente, pizza, esta semana hemos comido una pizza un poco especial, una pizza calzone que es una variante originarira de Nápoles y que consiste, así a grosso modo, en hornear la pizza cerradita, como una empanadilla gigante pero, claro, con masa de pizza.
Y, para hacerla aún más diferente, elegí harina de centeno para la masa, que le da un aroma particular que a mí personalmente me encanta y que los cachorritos han aprendido a apreciar también.
Además, hemos hecho dos versiones: la infantil que va rellena de ibéricos y la de los papás, vegetal en esta ocasión.
Como en todas las pizzas, utiliza tu imaginación y el contenido de tu despensa para hacer cada día una pizza diferente.

Ingredientes:
Para la masa:
  • 275-280 ml. de agua
  • 1 chorro de aceite de oliva
  • 1 cucharadita de sal
  • 200 gr. de harina de trigo
  • 250 gr. de harina de centeno integral
  • 10 gr. de levadura fresca de panadero
Para el relleno:
  • tomate frito
  • queso al gusto (mozzarela, provolone, queso para fundir... nosotos usamos una mezcla de tres quesos y, además, un poco de queso gouda que rondaba por el frigorífico triste y abandonado)
  • versión infantil: surtido de ibéricos - chorizo, jamón, lomo- y unos taquitos de beicon.
  • versión adulta: 250 gr. de champiñones, 1 puerro, 2 dientes de ajo.


Elaboración:
  1. Lo primero es preparar la masa: ponemos todos los ingredientes, en el orden indicado, en la cubeta de la panificadora y seleccionamos el programa de amasado con levado. En una hora y media tenemos la masa lista.
    Si no tenemos panificadora, habrá que amasar a mano hasta que los ingredientes estén completamente integrados. Formamos una bola y reservamos bien tapado hasta que leve y doble su volumen.
  2. Mientras la masa reposa, podemos ir preparando el relleno de los calzone "versión papis": en una sartén, sofreímos los dos dientes de ajo. Cuando empiecen a dorarse, añadimos el puerro cortado en rodajas finitas y, cuando este blanquee, el champiñón laminado. Salteamos hasta que el líquido de las verduras se evapore para que al añadirlo a la pizza la masa no se nos quede blanda.
    Reservamos.
  3. Precalentamos el horno a 200º.
  4. Enharinamos ligeramtene la superficie de trabajo, volcamos la masa y la dividimos en cuatro partes. Las mías no fueron iguales porque los calzone para los cachorritos eran un poco más pequeños, pero ahí, ya va nuestra organización y nuestros gustos.
    Incluso con esta cantidad de masa, podemos dividirlo en 5 o 6 partes porque salen bastante grandecitos.
  5. Estiramos cada porción de masa con un rodillo hasta obtener un disco fino. Cuanto más fino más crujiente; de nuevo interviene nuestro gusto.
    En la mitad del disco ponemos una fina capa de tomate frito, el queso elegido y el relleno (los ibéricos para los cachorritos, las verduras para los papis), de nuevo queso y otra cucharada de tomate frito.
    Doblamos la masa para cerrarlo, en forma de empanadilla gigante y sellamos los bordes. Lo más fácil es humedecernos ligeramente las manos y presionar.
    Hacemos un pequeño agujerito en la parte superior para que salga el vapor de la cocción de los ingredientes y quede cruijiente.
  6. Depositamos los calzone sobre la bandeja de horno forrada con papel parafinado y horneamos a 200º durante 30 minutos, aproximadamente, hasta que la superficie comience a dorarse.
    Si nos apetece, cuando queden 5 minutos, podemos espolvorear la superficie también con queso. No es que sea muy tradicional, pero queda muy vistoso.
  7. Servimos inmediatamente y comemos caliente, aunque con cuidado: quema más que una pizza normal al estar los ingredientes cerrados.

Menú sugerido:
Si elegimos la versión infantil, lo más adecuado será acompañar el calzone de una verdura ligera o una ensalada. Para la versión adulta, porqué no elegir también ensalada, hoy comemos vegetariano: o os sugiero cualquiera de estas ensaladas que podéis ver aquí.

Y de postre, como hemos comido ligerito, podemos permitirnos algo un poco más calórico. Y para no salir de Italia, qué mejor que un tiramisù. Podéis elegirlo de limón o de nutella.

¡Que aproveche!


¡Ah! No os olvidéis de visitar el blog de Bake the world para ver más propuestas. Tendréis pizza para unos cuantos meses y seguro que ideas deliciosas.

jueves, 24 de abril de 2014

Ensalada de pasta con vinagreta de fresas

Hoy, para celebrar que Cocinando para mis cachorritos tiene nuevo look del que me siento súpero orgullosa a pesar de no ser mérito mío, os propongo una ensaladita fácil que será perfecta para los días de calor y para poner en el táper para la oficina o para una excursión primaveral o veraniega.

Pero antes de contaros la receta, quiero agradecer a Romina, la estilista que ha cortado y teñido el blog, que lo ha maquillado hasta dejarlo así de bonito porque yo le di unas pautas sobre qué quería, pero eran tan difusas que me sorprende que haya sido capaz de atinar tanto y de hacer algo tan chulo a partir de unas indicaciones tan ligeras como las que yo le di.
De verdad, si queréis darle un giro a vuestro blog, dejarlo bien bonito, no dudéis en hablar con ella porque además de trabajar muy bien, hacer cosas muy chulas, es un encanto de persona y paciencia tiene un rato; ella es también bloguera, cocina en Lemon and tangerine y diseña en Lemon and tangerine diseños, así que sabe un poco de este mundillo de los blogs (bueno, un poco no, un mucho)

Dicho esto, vamso con la receta de hoy que no es muy acorde para el tiempo que se nos ha estropeado, pero que os va a ser muy útil, ya os lodije antes, para el sol que se avecina:

ENSALADA DE PASTA CON VINAGRETA DE FRESAS


Ingredientes:
(para 2 personas)
  • 200 gr. de pasta (la que más os guste; yo he usado en esta ocasión macarrones, pero cualquiera vale)
  • 1 filete de pechuga de pollo (o restos de pollo asado del fin de semana)
  • 100 gr. de rúcula
  • 2 tomates
  • 100 gr. de taquitos de queso de cabra
Para la vinagreta:
  • 2 cucharadas de mermelada de fresa; si es casera, mucho mejor. Aquí puedes ver cómo prepararla.
  • 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
  • 2 cucharaditas de vinagre de módena
  • una pizca de sal
Elaboración:
  1. Cocemos la pasta en abundante agua salada hirviendo.
    Tendrá que cocer el tiempo indicado en el paquete que varía según el tipo de pasta.
    Escurrimos, lavamos con agua fría y reservamos en el mismo escurridor, para que no queden restos de agua.
  2. Lavamos bien la rúcula y los tomates y ponemos como base en el plato de la ensalada.
  3. Pasamos el filete de pechuga, salado al gusto, por la sartén con una gota de aceite de oliva hasta que esté bien hecho. Troceamos.
    Si vamso a usar restos de pollo asado, por ejemplo, tendremos que partirlo. Para facilitar la labor, lo calentaremos un poco en el microondas, con un minuto será suficiente.
  4. Montamos la ensalada con los ingredientes anteriores.
La vinagreta:
  1. Hacer esta vinagreta es bien sencillo, basta con poner todos sus ingredientes en un bote con tapa y agitar hasta que todos se mezclen bien.
  2. Regamos la ensalada, al gusto, con esta mezcla y ¡a comer!
Observaciones:
Si no la váis a comer inmediatamente, para su perfecta conservación, es mejor guardar unas precauciones muy sencillitas: en primer lugar, el tomate no lo cortaremos hasta el momento de su consumición, para que no se nos reblandezca y, en segundo lugar, tampoco hay que echar la vinagreta hasta que el mismo momento de llevar la ensalada a la mesa porque el resto de ingredientes pierden tersura con la humedad.
Así que si esta ensalada va al táper o de excursión, a parte tendremos que llevar los tomates enteros, es decir, sin partir (aunque podemos llevarlos ya lavados) y la vinagreta que podemos transportar en el mismo bote en el que la hemos mezclado.
Con estos dos detallitos tendréis una ensalada deliciosa y como recién hecha. No me diréis que no es facilona, ¿no? 

Menú sugerido:
Segundo plato: rollitos de perca.
Postre: pieza de fruta y, para acompañar el café, una galletita de violeta.

Disfrutadlo.

domingo, 20 de abril de 2014

Double chocolate poke cake (microondas)

Un poke cake, voy a empezar explicándolo, es un bizcocho lleno de agujeritos rellenos de alguna crema y generalmente recubierta de nata montada u otro frosting.
Es una forma diferente de tomarse un bizcocho, casi una tarta y esta ha sido este mes la propuesta del Desafío en la cocina, de la mano de Carolina, de Tomillo, Laurel y otras cosas de comer.


Como mi cachorrita pequeña es muy golosa y le encanta que le lleve dulces para merendar a la salida del cole, pensé que era buena idea preparar este en formato individual en su honor y por eso se me ocurrió hacerlos en botes de cristal.
Además, para hacerlo más fácil y muy rápido, el bizcocho está hecho en el microondas. Ya había hecho alguna prueba anteriormente y, además de ahorrar energía y tiempo, es una opción fantástica para que los cachorritos puedan ayudarnos en la cocina.

Además, lo he llamado "double chocolate" porque se trata de un bizcocho de chocolate, relleno de ganaché de chocolate blanco.

Ingredientes:
(para 4 botes de cristal medianos)
Para el bizcocho:
  • 175 gr. de harina de todo uso (en esta ocasión y usé 100 gr. de harina de trigo y 75 gr. de harina integral de espelta)
  • 3 cucharadas soperas de cacao en polvo
  • 1 pizca de sal
  • 125 gr. de azúcar
  • 1 cucharadita de postre de levadura química, tipo royal.
  • 50 ml. de aceite de oliva suave
  • 1 huevo
  • 1 cucharadita de esencia de vainilla
  • 125 ml. de buttermilk (pincha aquí para ver cómo prepararlo)

Para el relleno:
  • 2 tabletas de chocolate blanco para postres
  • 150 ml. de nata líquida
Para decorar:
  • 250 ml. de nata para montar
  • 2 cucharaditas de azúcar.
***Necesitarás, además, una cuchara de madera con el mango redondo (u otro utensillo de cocina con el mango redondo y más bien grueso) y 4 tarros de cristal medianos.


Elaboración:

El bizcocho:
Necesitaremos la ayuda de los cachorritos de la casa, esta parte la pueden hacer ellos fácilmente:
  1. Preparamos la buttermilk y dejamos reposar 10 minutos.
  2. Mezclamos los ingredientes secos (harinas, sal, azúcar y levadura) en un bol. Reservamos.
  3. Mezclamos el resto de ingredientes húmedos (aceite y huevo) en otro bol, algo más grande y, cuando hayan pasado los 10 minutos de reposo, añadimos el buttermilk. 
  4. Incorporamos después los ingredientes secos mezclando bien con una lengua de silicona o con una cuchara de madera, teniendo cuidado de que no queden grumos, aunque es bastante difícil que salgan.
  5. Rellenamos los botes de cristal hasta la mitad (aquí es conveniente que echemos una mano nosotros a los cachorritos para que la masa no termine más fuera que dentro) y metemos en el microondas.
  6. Programamos el microondas a potencia máxima un minuto por cada bote, es decir, en esta ocasión, 4 minutos.
    Comprobamos pinchando con un palito que el bizcocho está completamente hecho. Si no es así, vamos poniendo 30 segundos más cada vez hasta que esté a nuestro gusto.
  7. Sacamos del microondas y dejamos templar. Entonces, cuando esté templado, tendremos que llenarlo de agujeros usando el mango de la cuchara de madera que os he dicho antes que necesitaríais. Cuantos más agujeritos, más relleno, pero cuidado no destrocéis el bizcocho.
    A mí, con 4 por cada bote me fue suficiente, pero si os apetece, podéis hacer alguno más, no muchos.
  8. Reservamos hasta que el bizcocho esté completamente frío.
La ganaché:
Esta parte es mejor que no la hagan los niños: podrían quemarse.
  1. Ponemos en un cazo al fuego la nata. 
  2. Cuando empiece a calentarse, incorporamos el chocolate blanco troceado y removemos hasta que esté totalmente derretido. 
  3. Retiramos del fuego y, aún caliente, vamos rellenando con esta crema los agujeros de los bizcochos.
  4. Reservamos el bizcocho relleno en el frigorífico al menos 8 horas. Se puede hacer de un día para otro.
Decoración final:
  1. Montamos la nata con ayuda de unas varillas eléctricas. La nata tendrá que estar bien fría para que monte bien.
  2. No nos olvidaremos de añadir un par de cucharaditas de azúcar.
  3. Con la ayuda de una manga pastelera y de nuestra habilidad (la mía escasa, como podréis comprobar) decoramos los botecitos.

En las imágenes se ve, en el bote "principal" uno de los agujeros hechos con el mango de la cuchara y ya relleno de ganaché.
El bizcocho así porcionado, es ideal para congelar. De hecho yo decidí hacerlo en este formato precisamente por eso: se congela y se saca con unas horas de antelación para llevar al cole una merienda casera y muy dulce, que a los cachorritos les encanta y de vez en cuando se lo merecen (bueno, se lo merecen siempre, pero no es conveniente que merienden a diario estas cosas, por muy caseras que sean).

Menú sugerido:
Este bizcocho, con su relleno y su cobertura, es contundente y, además, por su tamaño, es una merienda ya por sí solo (yo lo desayuné un día y no fui capaz de terminarlo), así que bastará con acompañarlo de un zumo de fruta para tener una merienda completa.

Espero que os haya gustado. Si queréis tener alguna idea más para preparar este divertido bizcocho, pasad por el blog del Desafío en la cocina y veréis las propuestas de mis compañeras:

Estamos ya finalizando la semana santa, así que solo me queda desar que disfrutéis lo poco que queda.

martes, 15 de abril de 2014

Tapa de morcilla con queso de cabra, piñones y cebolla confitada sobre plato de hojaldre

Este mes en el reto "Cocinamos con Reina" visitamos Castilla y León y degustamos su morcilla de Burgos. Aprovechando que tenía invitados en casa decidí hacer yo este reto, con lo rica que está la morcilla de Burgos seguro que se me ocurría algo con ella. Y al final me salió este aperitivo fácil de hacer y buenísimo.


Ingredientes
(para 12 unidades)
  • Morcilla de Burgos
  • 1 cebolla caramelizada (podéis verla cómo se hace pinchando aquí)
  • 1 rodaja de rulo de cabra
  • 1 plancha de masa brisa o de hojaldre


Elaboración:
  1. Cortamos la plancha de masa brisa en círculos, un poco más grandes que el diámetro de la morcilla.; para ello podemos usar un vaso o un cortapastas.
  2. Cortamos la morcilla en rodajas y la colocamos una a una sobre la masa.
  3. Ponemos encima unos trocitos de rulo de cabra y dos o tres piñones.
  4. Lo colocamos en la bandeja de horno (sobre papel de horno para que no se nos pegue) y horneamos durante 15 - 20 minutos a 170 grados. Mientras se hornea podemos aprovechar para caramelizar la cebolla.
  5. Sacamos del horno, colocamos por encima la cebolla caramelizada y servimos antes de que se enfríe.
Como véis un pincho fácil que tiene un resultado muy vistoso y, sobre todo, muy rico.
A los cachorritos se lo podéis poner sin la cebolla caramelizada que suele ser lo que menos les gusta. El toque de los piñones les va a encantar.
Espero que a vosotros también.

Podéis ver más ideas de cómo cocinar la morcilla de Burgos en el blog del reto Cocinamos con Reina pinchando aquí o en la imagen. Absolutas delicias y muchas y muy buenas ideas, seguro.


Menú sugerido:

Hoy nos vamos de pinchos. Después de este de morcilla, podéis coger un poquito de cada uno de los que os sugiero a continuación:
Pinchos de Madrid y pinchos de atún y huevo.
Humus (delicioso con unos picatostes)
Magdalenas de cebolla caramelizada.


domingo, 13 de abril de 2014

Mermelada de fresas

Ya se ha convertido en costumbre en mi casa utilizar las frutas de temporada para hacer mermelada y, esta vez, le han tocado el turno a las fresas.
Lo cierto es que nunca me había emocionado la mermelada de fresa pero ya he comprobado que las comerciales no tienen absolutamente nada que ver con las caseras y, desde que hice la mermelada de moras silvestres y me entusiasmó (sigue siendo mi favorita, eso sí) supe que la de fresas también me iba a encantar y no me equivoqué, así que, sin más demora y para que podáis prepararla para hoy mismo, aquí tenéis la receta:




Ingredientes:
(La cantidad de fresas es orientativa;
si tenéis menos, reducid también la cantidad de azúcar en la misma proporción)
  • 500 gr. de fresas
  • 350 gr. de azúcar (habitualmente para hacer las mermeladas se usa la misma cantidad de azúcar que de fruta; yo prefiero echar algo menos porque no me gustan tan dulces, pero está claro que eso ya va al gusto de cada cual) Con esta cantidad que os indico, la mermelada queda ligeramente ácida, pero el sabor a fresa es intenso y yo lo prefiero así.
    Podéis añadir más.
  • 1 manzana descorazonada, lavada y sin pelar.
Preparación:
  • Quitamos el pedúnculo a las frseas y las lavamos bien bajo un chorro de agua fría y dejamos escurrir.
En My Cook:
  1. Echamos las fresas a la jarra y las trituramos al gusto con un par de golpes de turbo. Según si nos gusta encontrar trozos en la mermelada o no, así dejaremos el puré de fresas.
  2. Incorporamos la manzana cortada en cuartos y programamos 30 minutos, 100º, velocidad 2, con el cestillo colocado del revés sobre la jarra para permitir que se evapore el líquido y quede así más espesa.
    La manzana también tiene esta función.
  3. Repartimos en botes, los tapamos y los dejamos enfriar boca abajo. Lista para consumir.
En panificadora:
  1. Ponemos todos los ingredientes en la panificadora y seleccionamos el programa de mermeladas.
  2. Terminado el programa, retiramos la manzana, sacamos la mermelada de la cubeta y pasamos la batidora hasta dejarla con la textura deseada.
  3. Repartimos en botes, los tapamos y los dejamos enfriar boca abajo. Lista para consumir.
**También puedes triturar la fruta antes de ponerla en la cubeta de la panificadora.

De manera tradicional:
  1. En una cazuela ancha ponemos todos los ingredientes a fuego alto. Esperamos hasta que la mezcla llegue a ebullición y luego bajamos el fuego, procurando que no deje de cocer y removiendo constantemente para que no se agarre.
  2. Deberá cocer aproximadamente una hora. Sabremos que la mermelada está lista cuando las fresas se aplasten fácilmente con un tenedor.
  3. Pasamos la batidora hasta obtener la textura deseada.
  4. Repartimos en botes, los tapamos y los dejamos enfriar boca abajo. Lista para consumir.

Menú sugerido:
Hoy el menú sugerido será un desayuno saludable en el que la mermelada de fresa tendrá un papel protagonista. Puedes untarla sola o con una pizca de mantequilla sobre una rebanada de pan de molde con salvado de trigo. Si acompañas todo con un vaso de leche o un café con leche (lo siento, es uno de mis vicios, necesito el café para comenzar el día) y una pieza de fruta o un zumo de naranja recién exprimido, tendrás energía de sobra para ponerte en marcha, tendrás vitaminas, fibra y cereales. Todo lo necesario para arrancar.

Si prefieres, puedes untar la tostada con otra mermelada, aquí tienes alguna más, todas caseras y muy ricas. Puedes elegir de piña, de moras, de mandarina o esta de fresas. Como en los mejores bufés ;)


Más recetas con fresas de este blog: vinagre de fresas, ideal para aliñar tus ensaladas durante todo el año.

jueves, 10 de abril de 2014

Hornazo de Salamanca porque del cerdo #hastalosandares

Hay un refrán popular que afirma que del cerdo se aprovechan hasta los andares. No le falta verdad porque es un animal del que se aprovecha cada gramo de su pobre cuerpito para preparar mil y una elaboraciones. Su uso ha sido siempre muy típico en los pueblos de España, quizá porque tener cerdos en casa, en las porquerizas, era más fácil que tener otro tipo de ganado y porque, además, no necesitan una alimentación especial: tradicionalmente se les alimentaba con los restos de comida de la casa así que, al final todo repercutía y todo se aprovechaba.

Para demostrar que es cierto y que del cerdo, #hastalosandares, este mes, desde La cocina typical spanish se ha propuesto la elaboración de recetas con carne de cerdo y yo, después de pensar (poco) me decidí a preparar el típico hornazo salmantino que se come el lunes de aguas, el lunes después de la semana santa. 
Aunque actualmente el lunes de aguas se aprovecha para comer en familia o con los amigos en el campo, sus orígenes son mucho  más divertidos: cuenta la tradición que Felipe II prohibió en la ciudad de Salamanca, cuna del saber (de muchos tipos de saber, incluído el más mundano, lo que suele suceder siempre que hay muchos estudiantes juntos) el consumo de carne durante la cuaresma. Bueno, el consumo de carne ya estaba prohibido, pero él hizo extensiva esta prohibición a otro tipo de carne y, por ese motivo, expulsaba a las prostitutas de la ciudad durante el periodo cuaresmal, permitiéndoles regresar solo cuando la semana santa había terminado: el lunes después de semana santa vino a llamarse lunes de aguas porque los estudiantes recibían las prostitutas con tal contento, que terminaban a remojo en el agua del río Tormes. Y, para pasar el día, además, llevaban viandas: lo que hoy conocemos como el hornazo salmantino que ya se vende en esta ciuidad en toda época del año pero que, originalmente, se consume el llamado lunes de aguas, como os he explicado.


Yo lo he comido en "versión moderna" con amigos pasando el día en el campo cuando, de jovencita, iba al pueblo de mi amiga Almudena, en Salamanca, lindando casi con Portugal. Un pueblo pequeño pequeño con pocos habitantes durante el año y muchos en época estival y otras fiestas Ahigal de los Aceiteros. En esta versión que yo probé, el hornazo llevaba, además de los ingredientes que detallaré luego, huevo cocido. Parece ser que el huevo se consideró carne en algún momento de la historia y por eso tampoco estaba permitido comerlo durante la cuaresma, así que luego, terminada esta, tenían que consumir los huevos que habían ido acumulando porque las gallinas de esta cosas no se enteran y seguían poniendo huevos.
Este es el motivo por el que muchas preparaciones de fin de cuaresma llevan huevos cocidos: el hornazo en algunos pueblos de Salamanca, las monas de pascua, etc. 

Pues nada, después de esta extensa introducción, vamos con la receta:

Ingredientes:
Para la masa:
  • 500 gr. de harina panificable
  • 100 ml. de aceite de oliva
  • 150 ml. de agua
  • 10 gr. de levadura fresca de panadero
  • 1 cucharadita de sal
  • 1 pizca de azúcar
** Las cantidades de agua son orientativas; cada harina absorbe el líquido de una manera. La que yo he usado en esta ocasión me ha pedido más agua que la que uso habitualmente. Estad pendientes, tenéis unas indicaciones aquí.

Para el relleno:
  • 1/2 kg. de cinta de lomo adobada, en filetes.
  • 1/2 kg. de chorizo tierno
  • 300 gr. de jamón serrano


Preparación:
  1. Primero vamos a dejar la masa lista para que vaya fermentando. Para ello pondremos todos los ingredientes en la jarra de la My Cook y programamos la función de amasar durante 3 o 4 minutos, hasta tener una masa lisa y brillante. Si vemos que necesita algo más de tiempo, lo añadimos.
    Igual que con el agua, este es el momento de añadir un poco más si consideramos que es necesario, pero la masa resultante no tiene que ser pegajosa.
    Dejamos reposar (puede ser dentro de la jarra, bien tapada) hasta que doble, más o menos, su volumen.
  2. Cuando la masa esté lista, encendemos el horno a 200º y mientras va tomando temperatura, ponemos en una bandeja forrada con papel parafinado los filetes de cinta de lomo y los horneamos un poco para que no estén crudos en el momento de rellenar el hornazo.
  3. Mientras tanto, volcamos la masa en la superficie de trabajo, la amasamos ligeramente para desgasificarla y la dividimos en dos.
    Reservamos una de las mitades tapada con un paño de cocina limpio y extendemos la otra con el rodillo hasta obtener un rectángulo del tamaño deseado, algo menor que una bandeja de horno. Ponemos sobre la bandeja de horno forrada con papel de hornear y repetimos la operación de estirado con la otra mitad de la masa.
  4. Colocamos sobre la base de masa el chorizo tierno cortado en lonchas gruesas, los filetes de cinta de lomo que estarán ya listos y las lonchas de jamón serrano. 
  5. Tapamos con la otra mitad de la masa y sellamos los bordes para que no se salga el relleno. Para que quede bien cerradito, podemos mojarnos las manos con un poco de agua y presionar ligeramente para que las dos masas se queden bien pegadas y no se nos abra al hornear.
  6. Horneamos durante 20-25 minutos a 180º, hasta que la masa esté doradita.
  7. Sacamos y dejamos reposar sobre una rejilla.
El resultado, aunque en apariencia recuerda a una empanada, es más un pan relleno, del estilo de los bollos preñaos, pero plano y sin la miga de estos. Perfecto para llevar y comer fuera de casa. Pues no sabían nada los estudiantes salmantinos cuando se lo inventaron ;)

Observaciones:

Para hacer la masa sin My Cook existen varias posibilidades: si tienes panificadora, dispón en la cubeta primero los ingredientes líquidos y luego los sólidos y selecciona el programa de amasado o amasado con levado, según nuestra necesidad.
Y si tampoco tienes panificadora, toca amasar a mano: haz un volcán con la harina, disuelve la levadura en el agua y pon en el centro del volcán todos los demás ingredientes. Ve amasando con cuidado hasta obtener una bola de masa lisa y brillante que dejarás reposar en un lugar alejado de las corrientes de aire. A partir de aquí, continúa con la receta desde el paso 2.

Antes de meter el hornazo al horno, podemos decorarlo con restos de masa. Lo tradicional es hacer un enrejado, pero cuando los cachorritos meten mano, pasan estas cosas:


Menú sugerido:
Primer plato ligero, que el hornazo es contundente; una ensalada es ideal, aquí tienes varias para elegir: variadito de ensaladas.
Segundo plato: hornazo de Salamanca.
Postre: pieza de fruta y, si te apetece, mousse de café.

Solo me queda invitaros a pasar por el blog de La cocina typical spanish para que veáis el montón de sugerencias para preparar la carne de cerdo. Porque sí, chicos, sí, del cerdo se aprovechan #hastalosandares.




P.D.: Esta receta se la he robado a mi salmantina favorita, Amalia, de Cuadernos de Cocina. Mi versión es un poco diferente, podéis ver la suya pinchando aquí.

lunes, 7 de abril de 2014

Mousse de café

Este mes el reto ¡Qué rico, mami! tiene como anfitriona a Mara, de Más dulce que salado que nos ha propuesto hacer postres en vasito.
Un formato que, además de bonito, es súper práctico porque no hay luego que porcionarlo después, con los comensales pendientes y expectantes. 

Esta vez yo me he decantado por un postre no apto para niños, porque las mamás también nos merecemos un caprichito. Se trata de una mousse de café que a mí me ha parecido deliciosa.
Los cachorritos, esta vez, tendrán que elegir entre las propuestas de las demás participantes en el reto porque estoy segura de que algo habrá que les guste.


Ingredientes:
(para dos vasitos)
  • 1 clara de huevo.
  • 100 gr. de queso mascarpone
  • 1 sobre o 3 cucharadas de postre de café soluble (descafeinado o no, según el gusto)
  • 4 cucharadas de azúcar glass.
Elaboración:
  1. Mezclamos el queso mascarpone con 2 o 3 cucharadas de azúcar glass, según nuestro gusto, hasta que la mezcla obtenga la consistencia de una crema. Incorporamos el sobrecito de café soluble y mezclamos bien para que se integre.
    Reservamos.
  2. Con la ayuda de unas varillas eléctricas, montamos la clara de huevo junto con otro poco de azúcar glass, hasta que quede bien firme y al dar la vuelta al recipiente no se caiga.
  3. Mezclamos la clara con la crema de café, siempre con movimientos envolventes para que no se baje y reservamos durante un par de horas en el frigorífico antes de servir. 
  4. Servir frío.


Observaciones:
Y Sobre las claras, os recomiendo que leáis este post de Macarena del blog Bajo una nube de azúcar glass porque os aclarará las dudas. A mí, al menos, me valió de mucho porque yo tengo siempre claras congeladas, de cuando la receta pide solo yemas y no tenía yo claro si me iban a montar después de descongeladas. Montaron de maravilla, así que vía libre para usarlas.
Y Se puede sustituir el queso mascarpone por queso de untar, tipo philadelphia que suele estar más presente en nuestras casas y si, además, se utiliza la versión light, tenemos un postre algo más bajo en grasas porque la clara de huevo es rica en proteínas pero no tiene casi nada de grasa.

No os olvidéis de pasaros por ¡Qué rico, mami! y ver los demás vasitos. Yo voy corriendo, a ver si pillo algo para los cachorritos.



Menú sugerido:

Hoy, plato único, muy completo, que encantará a los cachorritos y os ayudará a que se coman la verdura casi sin enterarse: calabacines rellenos de carne.
Postre: pieza de fruta y mousse de café.

PROMOCIÓN 150 EUROS DE DESCUENTO:
Os recuerdo que estamos colaborando en la promoción del campamento de verano que la empresa Berlitz realiza en la Sierra de Cazorla.
Se trata de un campamento de inmersión lingüística en el que los cachorritos disfrutarán de actividades deportivas en un entorno privilegiado y siempre en inglés, asistidos por monitores expertos y nativos.

La buena noticia es que si decís que vais de nuestra parte os harán 150 € de descuento sobre el precio marcado. No está nada mal, ¿verdad?
Pues ya estáis contactando en el coreo camps@berlitz.es y ¡no os olvidéis: de parte de Cocinando para mis cachorritos.!

Podéis ver todos los detalles pinchando aquí.

jueves, 3 de abril de 2014

Arroz tres delicias

Me he puesto exótica últimamente y me ha dado por visitar el mundo a través de su gastronomía. Lo cierto es que si, además, los cachorritos acompañan, pues una se anima y sigue probando cosas nuevas.

Aunque esta receta de arroz tres delicias no es nada novedosa y probablemente ni siquiera es china, a los cachorritos les encantó la idea de comerlo con palillos igual que hicieron con los fideos chinos. Así, además, conseguimos pasar un buen rato y aprender que no en todo el mundo se hacen las cosas igual. La cocina es una forma fantástica de enseñarles cosas.


Ingredientes:
  • 1 vaso de arroz basmati. Yo usé el que me enviaron de la casa Dacsa.
  • 2 vasos de agua 
  • 100 gr. de gambas peladas (congeladas o no)
  • 100 gr. de guisantes congelados
  • 100 gr. de jamón de york o fiambre de pavo
  • 1 huevo (opcional) 
  • aceite de oliva
  • sal
  • salsa agridulce (opcional)
  • 2 dientes de ajo.
Preparación:
  1. Primero tenemos que cocer el arroz. Procuraremos dejarlo un pelín entero, ya veréis después para qué.
    Lo haremos así: en la propia cazuela echamos un chorro de aceite de oliva y un par de dientes de ajo; sofreímos y cuando los ajos empiecen a dorarse, agregamos el arroz.
    Removemos para que se tueste un poquito e incorporamos el agua. Llevamos a ebullición, salamos al gusto y dejamos que el agua se evapore.
    Cuando el arroz esté listo, para que no se nos pase, lo apartamos del fuego y lo dejamos en un escurridor.
  2. Preparamos las tres delicias:
    Batimos el huevo y hacemos con él una tortilla francesa. Esto es opcional.
    En una sartén grande o en una olla con el fondo grueso, con un chorreón de aceite de oliva, salteamos las gambas, los guisantes y el jamón de york picado finito. Cuando esté listo, añadimos la tortilla y el arroz blanco.
  3. Salteamos todo para que el arroz quede fritito y crujiente y para que se integren los sabores y servimos acompañado de salsa agridulce si nos apetece.


Menú sugerido:
Primer plato: arroz tres delicias.
Postre: Mejor una pieza de fruta, pero si os apetece, podéis probar un poquito de mouuse de queso con granada.
PROMOCIÓN: 150 EUROS DE DESCUENTO.

Aprovecho esta entrada para daros a conocer el campamento de verano que, en la sierra de Cazorla (un entorno paradisíaco, Parque Natural, en plena naturaleza), organiza la empresa Berliz, avalada por catorce años de experiencia.
Podéis ver todos los detalles pinchando aquí, pero os avanzo que se trata de un campamento de inmersión en inglés en el que los niños realizarán actividades deportivas y de multiaventura conducidas siempre en inglés por monitores nativos y expertos.
Tiene una pinta sensacional y será toda una experiencia para los niños. Y la buenísima noticia que os traigo hoy es que si decís que vais de nuestra parte os harán 150 € de descuento sobre el precio marcado. No está nada mal, ¿verdad?
Pues ya estáis contactando con ellos a través de esta dirección de correo electrónico: camps@berlitz.es ¡y no os olvidéis: de parte de Cocinando para mis cachorritos!