Hoy vamos a celebrar que es jueves con una tarta espectacular. No muy complicada porque hasta yo, negada donde las haya para esto de la repostería, he podido hacerla sin mayores complicaciones y sin sufrir más de la cuenta. Al final, mirad, ha quedado bastante aparente, ¿verdad?
Y estaba buenísima.
La tarta en cuestión, muy clásica, de kit kat, la había visto ya por la red varias veces, pero la semana pasada la publicó mi amiga Patri del blog Las cosas de mi cocina y me entró tal envidia, que tuve que hacerla. Aproveché que el sábado tenía sarao familiar en casa, me lié la manta a la cabeza y se la copié.
Ella la hizo de kit kat negro (pinchad aquí para verla, no tiene desperdicio, ni la tarta ni el resto del blog, por cierto, lleno de delicias) , yo blanco porque al cachorrito mayor le gusta más el chocolate blanco y pensé que, a lo mejor así, podría convencerle de que la probara.
Fracasé en el intento, pero la tarta salió muy rica y muy mona y eso, para mí, es un triunfo, así que no me resisto a contaros cómo la hice.
Ingredientes:
Para el bizcocho:
- 3 huevos
- un yogur natural
- 1 medida del yogur de aceite
- 2 medidas de azúcar
- 3 medidas de harina
- 1 cucharadita de levadura tipo royal
- 1 tableta de chocolate blanco para fundir
- 1 tableta de chocolate blanco para fundir
- 1 brick pequeño (125 ml.) de nata líquida
- suficientes kit kat blancos para rodear todo el bizcocho
- bolitas de chocolate para la superficie
- 1 tableta de chocolate blanco para fundir que hará las veces de pegamento.
- 1 lazo para decorar
Elaboración:
- Lo primero de todo es preparar el bizcocho.
Mejor hacerlo el día de antes para darle tiempo a que se enfríe antes de proceder al relleno y la decoración.
Mezclamos todos los ingredientes (salvo la tableta de chocolate blanco) con la batidora hasta que estén completamente integrados.
Fundimos la tableta de chocolate blanco al baño maría o en el microondas y mezclamos con el resto de la masa del bizcocho.
Encamisamos un molde redondo (yo no lo encamisé y fue un error, os recomiendo que lo hagáis; espero que a mí no se me vuelva a olvidar), echamos la masa y horneamos a 170º durante unos 50 minutos, hasta que al pincharlo con un palillo este salga limpio.
Dejamos reposar otros 10-15 minutos dentro del horno abierto.
Sacamos del horno y desmoldamos cuando esté, al menos, templado.
Una vez desmoldado, dejamos reposar hasta que esté completamente frío antes de continuar. - Una vez frío el bizcocho, preparamos la ganaché calentando la nata. Cuando esté bien caliente, añadimos la tableta de chocolate blanco partida en trozos y removemos constantemente hasta que se derrita. Reservamos.
- Ahora comienza la parte complicada. Primero tenemos que rellenar la tarta; para ello tenemos dos opciones: podemos partir el bizcocho longitudinalmente a la mitad o utilizar la técnica del poke cake que podéis ver aquí y que consiste en agujerear el bizcocho con algún instrumento redondo y los suficientemente grueso (como la parte de atrás de una cuchara de palo, por ejemplo) y rellenar los agujeros con la ganaché.
Eso fue lo que hice yo porque me pareció más fácil que la otra alternativa. - Nivelamos la parte superior de la tarta si ha salido irregular y procedemos con el resto de la decoración.
- Fundimos la tableta de chocolate blanco y extendemos todo el chocolate fundido por la parte superior de la tarta y por los laterales. Pegamos las barritas de kit kat -el chocolate fundido nos ayudará, cuando solidifique, a que se queden bien pegados- y por encima colocamos las bolitas de chocolate.
Tendremos que sujetar las barritas de kit kat con el lazo hasta que el chocolate se haya solidificado, así que su función no es solo decorativa, no os olvidéis de él. - Cuando hayamos terminado, metemos la tarta al frigorífico para que el chocolate solidifique durante, al menos, un par de horas.
Observaciones:
Es una tarta deliciosa pero contundente, os reto a partir un pedazo pequeño sin destrozarla, ja ja ja, es absolutamente imposible, así que no os va a quedar más remedio que comeros uno grande.
Espero que os guste y, si os decidís a hacerla, que os sintáis tan orgullosa como yo al haber superado el reto de las tartas monas con éxito :)
Feliz jueves.
Qué bonita y qué bien presentada. A mí me encanta el chocolate blanco y el kit kat.., así que...no duraría en mis manos ni dos segundos...jajaja
ResponderEliminarUn besote!^^
Guau que bonita y que buena tiene que estar, yo quieroooo,,, !!! Rikiiiisima!! http://lasrecetasdefranciscoypablo.blogspot.com.es
ResponderEliminarVero te quedo de maravilla. Me encanta como has versionado la receta y puede que te la copie que yo también le tengo ganas desde que se la vi a nuestra Patri, haber si viene algún evento donde pueda llevarla y sino pues nada, la haré igualmente aunque no sea muy de dieta jejeje. Un beso guapisima
ResponderEliminarLa verdad es que queda preciosa y no habrá niño que no diga un, ohhhhh!! ,porque queda ideal para ellos....me alegro que te sientas tan satisfecha...besos
ResponderEliminarTe ha quedado muy...c....mona! me encanta mi querida B!
ResponderEliminarNunca la he hecho con kitkat blanco. Pero es una tarta que aunque varíes ( porque cada uno tiene sus gustos y recetas) el interior a los niños les encanta.
ResponderEliminarBesinos
Madre mía, dices que te ha quedado aparente. Yo sería incapaz de llegar a hacer ni el bizcocho bien. Preciosa. Seguro que tus cachorritos han disfrutado. Besos
ResponderEliminarEsto tengo que hacerlo, que ricura!!! Te ha quedado fenomenal!!! Qué presentación!!!
ResponderEliminarPreciosa tarta, muy vistosa y el chocolate blanco me encanta!
ResponderEliminarUn beso y feliz finde
Muy bonita. Expectacular
ResponderEliminarJolin con lo que me gusta el chocolate blanco. Estoy salibando ya je je
ResponderEliminarTe he conocido por la fiesta de Naikari
Un saludo