¡Qué poquito nos queda para semana santa!
Y qué mejor forma de ir metiéndonos en situación que con un pan casero para preparar las típicas torrijas.
Reconozco que siento debilidad por las torrijas. No me emocionan demasiado los dulces típicos de las fiestas religiosas porque suelen ser demasiado dulzones para mi gusto. El turrón, mazapán y demás dulces navideños no me llama nada de nada.
Pero las torrijas, ay, las torrijas. Me pierden, de verdad que sí.
Además recuerdo con verdadero cariño todo el ritual que preparábamos en casa cuando éramos pequeñas para ayudar a mi madre a hacerlas. Por supuesto, suya es la receta de las torrijas que podéis ver aquí. Soy consciente de que es la típica receta tradicional de la que habrá cien mil variantes, en cada casa la suya, como pasa, por ejemplo, con el cocido, pero esta es "la nuestra". No la que hemos inventado nosotros, sino la que hacemos en casa desde que yo recuerdo.
El año pasado me quedé con ganas de hacer yo misma el pan para preparar las torrijas, así que este año, para que no se me echara el tiempo encima, empecé hace unos días, por eso de hacer más pruebas si no salía bien del todo, pero me ha gustado tanto esta receta que encontré en el blog "Mercado Calabajío", que creo que será la que haga de aquí en adelante.
Tiene una textura como de brioche y la miga lo suficientemente compacta como para que no se deshaga luego al remojar la rebanada en leche, pero suave. A mí me ha encantado, no solo el pan en sí mismo, sino el resultado final, las torrijas, que al final es lo importante.
Ingredientes:
(para dos barras de unos 400 gr. cada una)
- 500 gr. de harina de fuerza
- 250 ml. de leche.
- 1 huevo para la masa y, opcionalmente, otro para pincelar las barras.
- 50 gr. de mantequilla ablandada
- 1 cucharadita de postre de azúcar
- 1 cucharadita de café de sal
- 15 gr. de levadura fresca de panadero.
Elaboración:
Yo, como casi siempre, hice un poolish utilizando 125 gr. de harina, 80 ml. de leche y 1 gr. de levadura. Lo dejé fermentar toda la noche para comenzar con la preparación del pan por la mañana. Podéis hacerlo si tenéis tiempo, pero personalmente creo que es uno de los panes en los que, si nos vemos apurados, mejor podemos prescindir del prefermento por el tratamiento que después le vamos a dar al pan: necesitaremos dejarlo un día o día y medio después de hechas las barras, para que se asiente y podamos trabajarlo mejor para hacer las torrijas.
- Ponemos todos los ingredientes en la cubeta de la panificadora y seleccionamos el programa de amasado.
Si no tenemos panificadora, amasamos a mano hasta conseguir una masa lisa y brillante, ligeramente pegajosa. - Dejamos levar, bien tapada la masa, en un lugar resguardado de las corrientes de aire, hasta que doble su volumen.
O dentro de la panificadora si el programa de amasado continúa con función de levado. - Volcamos la masa sobre la superficie de trabajo ligeramente enharinada, trabajamos un poco para desgasificarla y dividimos en dos.
- Con cada una de las dos mitades, hacemos una barra y la dejamos reposar ya en la bandeja de horno igual que antes: tapada y en un lugar resguardado de las corrientes de aire. Hasta que vuelva a doblar su volumen.
- Precalentamos el horno y, mientras, podemos hacerles a las barras unas incisiones para facilitar posteriormente el corte de la barra. Yo no lo hice porque se me olvidó :-0
- Pintamos las barras con huevo batido o con un poco de leche. Yo las pinté con leche, pero si queréis que queden más brillantes, usad huevo batido.
- Las metemos al horno y horneamos a 200º durante 20 minutos, aproximadamente.
- Sacamos y dejamos enfriar sobre una rejilla.
Recomendaciones:
- Es mejor no hacer las torrijas inmediatamente: la miga del pan debe asentarse un poco para que no se desmenuce luego al mojarlo en la leche o en vino, si es que optáis por hacer torrijas de vino. Uno o dos días es lo que yo os recomiendo. Uno como mínimo.
- Es un pan con la miga bastante densa, así que chupa bastante líquido a la hora de remojarlas. No escatiméis, que si no las torrijas saldrán secas. Si sois generosos en este punto, con este pan os saldrán unas torrijas de escándalo.
Para muestra, dos botones:
Estas las ha hecho un familiar a quien regalé una de las barras. Como véis, ella las deja remojadas en almíbar. |
Y estas son las mías. Yo prefiero dejar el almíbar a parte y que cada uno se riegue la torrija al gusto una vez servidas. Así quedan menos dulzonas. |
No os olvidéis de consultar aquí si tenéis alguna duda sobre cómo hacerlas.
ay que rico, y yo este año sin hacer torrijas, no puede ser. Que buenas te han quedado!!!
ResponderEliminarPues anímate ;)
EliminarYo hago torrijas todo el año, así que imagínate si nos gustan; aunque no preparo un pan especial, porque la panadera que pasa por aquí trae pan de leña y es estupendo para hacerlas. Tu barra se ve también estupenda.
ResponderEliminarBuen finde
Yo creo que a mí me saben taaan bien porque solo las como "en temporada". Es como algo súper especial y súper esperado. Podría hacerlas todo el año, pero creo que ya no sería lo mismo.
Eliminarmadre miaaaa,que arte niña! que ricas, a mi es que me encantan pero en mi casa regular,prefieren otros dulces....pero tu estás hecha toda una panadera! puedes con todos los panes! te felicito.....besos
ResponderEliminarGracias, Isa ;)
EliminarPues nada, chica, si en casa no les van mucho (a mis cachorritos tampoco, pero a papá y a mamá sí), hazte unas poquitas solo para ti ahora que se aproxima la semana santa.
Besos para ti, guapa.
¡Ay esa imagen de las torrijas a la mitad chorreando cómo me llama! Me encantan las torrijas, y además las hago muchísimo en cualquier ocasión, siempre que tenemos un poco de pan duro en casa nos ponemos manos a la obra. Con este pan deben estar sensacionales, con esa miga como dices tiene que absorber que da gusto y así quedan mucho más tiernos.
ResponderEliminarBesos
Tiernísimos. A mí es que me chiflan con el pan "tipo bollo", tipo brioche, vamos.
EliminarBesitos, guapa.
Creo que me has convencido para hacer las torrijas con pan incluído. La última foto ha acabado de convencerme. ¡Menuda pinta!
ResponderEliminarMe alegro de haberte convencido. Esa imagen ha tenido mucho éxito sí, jijiji.
EliminarA mi suegro le vuelven loco las torrijas !! jajaj y tu haces torrijas por partida doble es decir haces el pan y luego las torrijas ...Que arte tienes y que bien se te da eso de hacer pan. Yo simplemente no lo llevo ...ni bien ni mal ...no esta !! Y eso que me compre la panificadora pero ....no la uso !! a ver si encuentro un hueco y me leo aunque sea el libro del pan, que me compre hace tres meses y no lo he sacado ni de la bolsa y me dedico a hacer pan ..a ti te sale genial !! un besete
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